Querida Holly, Tal como eras, eras débil y sin embargo tan fuerte. Tal como eras, eras hermosa y, sin embargo, a menudo se te despreciaba o incluso se te cuestionaba. Tal como eras, estabas lleno de energía vital y, sin embargo, siempre muy cerca de la muerte. Tal como eras, ¡eras simplemente único y maravilloso! ¿Quién ha afirmado alguna vez …